Entre 1956 y 1959 vive en Barcelona, donde recibe el Premio Boscán y el de la Crítica. La censura se ensaña con sus libros, algunos de los cuales ha de publicar en el extranjero, como En castellano (que nacerá en París y con nombre francés, Parler clair) y que trata de España.
En 1960 recorre varios países socialistas (la Unión Soviética y China) y en 1964 viaja a Cuba, donde permanece cerca de tres años. Desde 1968 se instala en Madrid, donde publica Historias fingidas y verdaderas y antologías como Expresión y reunión, mientras sigue escribiendo su obra.
El 29 de junio de 1979 muere en su casa de Majadahonda, a los sesenta y tres años, víctima de una embolia pulmonar. Dejaba inédito su libro Hojas de Madrid con La galerna, que Galaxia Gutenberg y Círculo de Lectores editan en 2010, en edición de Sabina de la Cruz y con prólogo de Mario Hernández.